Remnant 2 – Review

Gunfire Games no tuvo un buen comienzo en el mundo del gaming con los lanzamientos de Herobound en el 2015 y Chronos en el 2016. Dado que ambos eran títulos exclusivos para VR y las ventas probablemente no fueron las esperadas, THQ Nordic decidió que el estudio debería hacer una versión de Chronos que prescindiera del requisito para cascos de realidad virtual y se estrenó en el 2020 bajo el nombre Chronos: Before the Ashes. Si bien este tampoco fue muy bien recibido por el público gamer, está claro que THQ Nordic no quiso desechar por completo la IP, ya que servía como precuela para Remnant: From the Ashes, el cual había tenido una buena recepción en el año 2019. Por supuesto, el relativo éxito de Darksiders III en el 2018 le dio al estudio cierto renombre y ayudó a catapultar la IP de Remnant bajo la tutela del publisher Perfect World Entertainment, quien luego vendería los derechos de Remnant a Embracer Group y la IP quedaría bajo el ala de Gearbox Publishing, una de sus tantas subsidiarias del conglomerado sueco.

Con una fórmula que mezcla elementos de los looter-shooter y mecánicas souls-like, pero con énfasis en las armas de fuego en vez de melé, Remnant se ha convertido con el pasar los años en un título que ha ganado una considerable cantidad de seguidores. El hecho de haberse regalado en Epic Games Store en agosto del 2020 y diciembre del 2021, ciertamente ayudó a que la base de fans creciera bastante y estuvieran expectantes de una segunda entrega, que finalmente se lanzó el pasado 25 de julio. Cuando Remnant 2 se reveló en los The Game Awards 2022, las expectativas fueron muy altas ya que Gunfire Games prometió una secuela más sólida y mejorada. Los numerosos trailers mostraban mundos más extensos y complejos con una amplia diversidad de enemigos, mejoras significativas en los gráficos y efectos visuales, y una narrativa más sólida. Cada uno de estos aspectos prometían elevar la experiencia a nuevos niveles, pero no todos ellos se cumplieron.

En principio, Remnant 2 hace un gran esfuerzo por ofrecer una narrativa más envolvente y coherente, pero lamentablemente, no logra alcanzar todo su potencial a medida que progresamos en los diferentes mundos. La trama continúa desde el final de «From the Ashes», donde el Caminante cerró el peligroso portal que amenazaba al mundo. Sin embargo, el problema persiste, ya que la presencia de La Raíz sigue causando estragos y un nuevo enfrentamiento es inevitable. Es aquí donde nuestro personaje entra nuevamente en acción, con la valiente misión de erradicar a esta raza malvada de monstruos de la tierra y de los otros mundos que ha afectado. Si bien el juego presenta un fascinante lore y cada mundo posee su propia historia, cultura y creencias que podemos descubrir a través de libros, diarios e interacciones con los habitantes locales, es un aspecto que no logra fusionarse de manera efectiva con la trama principal. La historia se hace cada vez menos interesante y profunda y es una pena, porque se podría haber aprovechado el rico trasfondo que ofrece el juego a lo largo de sus diferentes biomas.

En esencia, la historia y el lore parecen existir como dos entidades independientes, lo que genera una sensación de desconexión y falta de coherencia entre ambos elementos. Mientras que el lore aporta riqueza y detalle a los mundos que exploramos, su potencial para enriquecer la narrativa central queda subutilizado, dejando una sensación de insatisfacción ya que se esperaba una trama un poco más inmersiva y profunda. A pesar de estas limitaciones, los diversos mundos que visitamos en Remnant II siguen siendo fascinantes y enriquecedores, brindando una experiencia de juego diversa y atractiva. A través de los elementos de lore dispersos en el camino, podemos sumergirnos en la cultura y la historia de cada lugar, aportando un toque distintivo a cada mundo -si es que tenemos intención de sumergirnos en ellos, claro.

Uno de los cambios más notables es el sistema de arquetipos, el cual representa una supuesta mejora con respecto a las clases de su predecesor. En el juego anterior, las clases se diferenciaban según los ítems con los que empezaban, lo que permitía crear un personaje a nuestro gusto. Sin embargo, en Remnant 2, los arquetipos se presentan como objetos equipables como armas o anillos, con una progresión independiente y desbloqueos propios. Cada arquetipo ofrece diversas ventajas pasivas y tres habilidades activas, aunque solamente podemos usar una habilidad, mientras que las armas y armaduras serán distintas dependiendo del arquetipo que hayamos elegido

Tendremos una amplia variedad de arquetipos disponibles como Médico, Cazador, Contrincante, Domador y Pistolero al comienzo de la aventura, con la posibilidad de desbloquear más a lo largo del juego mediante objetos específicos. Cabe mencionar que varios de los arquetipos que podremos desbloquear se encuentran bastante escondidos y serán todo un desafío para poder encontrarlos. Una vez que hayamos avanzado en nuestra aventura podremos desbloquear la opción para equipar un arquetipo secundario, aumentando así la forma que tenemos para desarrollar a nuestro personaje. El problema de este sistema es que es un tanto limitado, o limitante. Solamente podremos usar dos arquetipos al mismo tiempo perdiendo así las ventajas pasivas que nos pueden dar el resto. Otro factor adverso es que, excepto por el arquetipo principal, el resto lo tendremos que encontrar o comprar a los comerciantes en la base 13 y para poder sacarle todo el provecho posible tendremos que subirlo de nivel, algo que nos llevara una buena cantidad de horas para que al final no nos convenza -y quizás nos obligue a volver a empezar con otro arquetipo diferente.

Al igual que otros juegos del mismo género, podremos mejorar nuestras armas a medida que avancemos en el juego. Cada 5-6 niveles, los requisitos para realizar mejoras en las armas se irán actualizando, hasta llegar al nivel 20 para las armas comunes y nivel 10 para las armas especiales. Sin embargo, es importante mencionar que las armaduras, anillos y amuletos no pueden ser mejorados de ninguna manera. Esta limitación resulta un tanto sorprendente, ya que las armaduras carecen de propiedades especiales o habilidades pasivas. Su único propósito es mejorar nuestra defensa y modificar nuestra apariencia visualmente. Una consideración no menor al elegir la armadura adecuada es el peso. Si optamos por una armadura extremadamente pesada, nuestro personaje no podrá rodar para escapar rápidamente de los enemigos. En lugar de eso, realizará una animación más lenta de caída al suelo y luego se levantará, lo que podría dejarnos expuestos si el enemigo es ágil y rápido. A pesar de esta reestricción en la mejora de armaduras, el sistema de actualización de armas brinda a los jugadores la oportunidad de personalizar y mejorar su arsenal a medida que progresan en el juego. La elección sabia de armaduras según el estilo de juego y las habilidades de nuestro personaje es esencial para enfrentar los desafíos que nos esperan.

Durante nuestra exploración, nos encontraremos con seis mundos distintos. La Base 13 funcionará como la base de operaciones donde podremos comprar objetos y mejorar nuestro equipo. Luego, encontraremos N’erud, un mundo futurista en una nave espacial que visualmente se asemeja a un desierto oscuro, lleno de zombies y robots. Por otro lado, Losomn nos llevará a un mundo medieval con un pintoresco pueblo y un majestuoso castillo al estilo Bloodborne, siendo, en mi opinión, el mejor mundo del juego. Su atractivo radica tanto en la diversidad de enemigos como en el impresionante arte visual de los edificios y la zona en sí. Root Earth representa el mundo final del juego y nos muestra una tierra completamente devastada por La Raíz. Los restantes mundos están compuestos por el laberinto, una zona pequeña pero llena de plataformas y portales, y por Yaesha, un mundo selvático. Estas dos últimas zonas ya las hemos visto en Remnant: From the Ashes, pero han recibido una notable actualización gráfica y se han añadido nuevos enemigos.

Una de las gratas sorpresas del juego fueron las emocionantes peleas contra los jefes. A diferencia de su predecesor, donde estas batallas a menudo se veían ensombrecidas por la presencia de numerosos enemigos adicionales, en Remnant II esta dinámica ha sido mejorada significativamente. Ahora, la mayoría de las peleas contra jefes se enfocan más en la batalla directa con estos poderosos enemigos, lo que hace que sean más interesantes y gratificantes. En general, los jefes presentan un amplio abanico de desafíos únicos y mecánicas intrigantes. Cada uno tiene su propio estilo de lucha, lo que obliga al jugador a adaptarse rápidamente y desarrollar estrategias inteligentes para enfrentarlos. Las peleas son variadas y requieren una combinación de habilidades, reflejos y paciencia para tener éxito.

Sin embargo, es justo mencionar que la pelea contra el jefe final es una experiencia compleja. Si bien es emocionante y ofrece múltiples fases, también puede resultar abrumadora debido a la gran cantidad de eventos que ocurren simultáneamente. En algunos momentos, el jugador se ve desafiado por la transición a otras zonas y los ataques sorpresa que pueden conducir rápidamente a una derrota. A pesar de esta dificultad, las peleas contra los jefes siguen siendo una de las mayores atracciones del juego. Cada encuentro es único y satisfactorio, recompensando a los jugadores con una sensación de logro después de superar estos desafíos monumentales. La mejora en el diseño de estas batallas ha logrado captar la emoción y la tensión, manteniendo a los jugadores en vilo mientras luchan por la supervivencia en este mundo infestado de peligros.

La verdadera magia de Remnant II se desata cuando decidimos explorar la campaña o el modo aventura en compañía de uno o dos amigos. Si bien el juego se puede disfrutar en solitario, compartir la experiencia con compañeros transforma por completo la forma en que vivimos la aventura. La cooperación se vuelve esencial, y debemos estar atentos al fuego amigo y ser cuidadosos con el manejo de la munición, ya que solo el jugador que recoge los suministros obtiene los beneficios. Unirse a partidas multijugador es un proceso sencillo y sin complicaciones, lo que nos permite sumergirnos rápidamente en la acción sin preocuparnos por problemas de lag o desconexiones. La sinergia entre nuestros compañeros durante el combate y la resolución de desafíos en equipo añaden una dimensión adicional de diversión.

El apartado grafico sentó una buena actualización con respecto a su antecesor. El uso de Enreal Engine 5 junto con la tecnología nanite para evitar el popping de geometrías (ya sean texturas u objetos) a larga distancia (algo recurrente con los juegos que utilizan UE4), llevan la calidad grafica a otro nivel, pero no sin tener problemas de rendimiento. Con un Core i7 12700, 32GB de RAM y una GeForce RTX 3070, tuve problemas para mantener los 60 FPS en 1080p con detalles Ultra. Incluso activando DLSS en Modo Calidad no hubo forma de solucionar las caídas de FPS o el fluctuante frame pacing, que esperemos que se solucione con futuros parches. Si bien no es un desastre técnico en varios sentido como lo fue The Last of Us en su lanzamiento, es una pena que los usuarios de PC tengamos que sufrir permanentemente este tipo de problemas y que los desarrolladores nos obliguen a utilizar tecnologías de reescalado, sabiendo que en 1080p los resultados visuales son inferiores a la resolución nativa.

En el video de gameplay del prólogo como también en la comparativa que se encuentra arriba, vemos cómo DLSS 3 logra que el juego, en resolución 1440p (no 1080p), pase de 45 a más de 60 FPS (ya que Frame Generation por alguna razón limita los FPS al refresco del monitor) y esto se logra con una RTX 4060 de US$ 299, al mismo tiempo que la RTX 3070 no puede mantener a 60 FPS en 1080p. Gunfire Games fue abucheado por la comunidad de PC por decir que Remnant II había sido desarrollado en mente para que los jugadores utilicen las tecnologías de reescalado (según la GPU que tengan), y es algo que es injustificable para la plataforma.

En 1440p (como se pone en evidencia en la comparativa) y 4K, la calidad de imagen con DLSS en Calidad es incluso superior a la nativa, pero en 1080p no, y la mayoría de los gamers en PC aún juegan en 1080p con placas como RTX 3060, 3060 Ti y 3070. Si bien se sigue demostrando en este y otros títulos que Frame Generation es el futuro de la optimización, en esta época de alta inflación y recesión, no todo el mundo puede darse el lujo de cambiar su GPU, menos en Argentina y otros países de Latinoamérica donde las RTX 30 (la mayoría minadas) se siguen vendiendo súper baratas.

A pesar de sus problemas de rendimiento e inestabilidad en el framerate, Remnant II sigue siendo una experiencia atractiva para los fanáticos de la franquicia y sobre todo para aquellos que disfrutaron de la primera entrega. No arriesga demasiado, pero mantiene su estilo único y su jugabilidad adictiva, ofreciendo nuevamente la opción de disfrutar la aventura junto a otros jugadores en el modo cooperativo.

Los mundos con estéticas únicas y los enemigos desafiantes siguen siendo el punto fuerte del juego, lo que sin duda brinda una experiencia distinta para quienes buscan un buen grado desafío acompañado de intriga, puzzles y una exploración que recompensa al jugador. Una vez más, es importante tener en cuenta que Remnant II no representa un cambio radical respecto a su predecesor. Aunque se han realizado mejoras, algunos aspectos que lastraban al primer juego todavía persisten, lo que podría dejar a algunos jugadores esperando una evolución más pronunciada. Aun así, para los amantes de la acción y la aventura, Remnant II sigue siendo una opción atractiva y recomendada para aquellos que buscan un looter-shooter poco casual o un souls-like pero con armas de fuego. La verdadera prueba para esta franquicia será si logra aprender de sus errores y crecer aún más con futuros DLCs o un posible Remnant III, para poder dar una experiencia aún más refinada y robusta. Dado que el juego vendió más de un millón de copias en menos de una semana y tuvo un pico de 110.000 jugadores simultáneos en Steam, es muy posible que Remnant II vaya más allá de sus planes iniciales para ofrecer aún más contenido a lo largo del 2023 y 2024.

Este review fue realizado con copias de prensa proporcionadas por Gearbox Publishing/Gunfire Games.