Headset Trust «GXT 433K Pylo»- Review

La entrada al mundo gamer de las computadoras generalmente suele ser costosa, sobre todo en la parte del hardware que nos dará la potencia bruta para jugar, por lo que muchos entusiastas terminan llegando con pocos recursos para todo lo que es periférico, obligándolos a adquirir productos de baja calidad para complementar sus sistemas.

Por suerte existen marcas como Trust, que dentro de su extenso catálogo de posibilidades también presenta modelos que buscan el balance entre no costar demasiado y ofrecer presentaciones de buena calidad para que ese primer acercamiento al hobby no sea frustrante debido a malas experiencias con otros productos.

En este caso nos toca experimentar la variante Camo Black del GXT 433 Pylo de Trust, un headset de un diseño elegante pero que no pierde la filosofía gamer, y que además cumple con lo indispensable para ofrecer comodidad, calidad de sonido, versatilidad y durabilidad.

El 433K Pylo viene contenido en una vistosa caja de impresiones en mate, donde se puede ver el dispositivo en todo su esplendor, casi en todas las caras del cartón, y los detalles de sus características en un diseño gráfico muy claro, y con algunos detalles en colores.

El headset viene contenido en una cuna de acetato transparente que lo sostiene firmemente para evitar golpes y rozaduras en el transporte, y es acompañado de un manual, un sticker y el correspondiente cable derivador con el que se conecta a la PC. Debido a su naturaleza multiplataforma, este se conecta a un plug CTIA que sale directamente del headset, el que es compatible directamente con las consolas PS5, PS4/Pro, Xbox Series S|X, Xbox One/X y Nintendo Switch.

• Desempeño
  • Tipo de producto: Auriculares
  • Estilo de uso: Diadema
  • Uso recomendado: Juego
  • Tipo de auricular: Binaural
  • Color del producto: Negro, Gris
  • Control de volumen: Giratorio
  • Longitud de cable: 1 m
  • Color del cable: Negro

• Puertos e Interfaces
  • Tecnología de conectividad: Alámbrico
  • Conector de 3,5 mm: Si
  • Conexión USB: No
  • Bluetooth: No

• Auriculares
  • Audifonos: Circumaural
  • Frecuencia de auricular: 20 – 20000 Hz
  • Obstrucción: 32 ?
  • Sensibilidad de auricular: 103 dB
  • Tipo de imán: Neodimio
  • Unidad de disco: 5 cm
  • THD, distorción armónica total: 1%
  • Reducción de ruido: No

• Micrófono
  • Tipo de micrófono: Boom
  • Frecuencia de micrófono: 100 – 10000 Hz
  • Efecto de cancelación de ruido: No
  • Tipo de dirección de micrófono: Omnidireccional
  • Micrófono plegable: No
  • Micrófono extraíble: No
  • Micrófono mudo: Si

• Requisitos del sistema
  • Sistema operativo Windows soportado: Si
  • Sistemas operativos móviles soportados: Si

• Peso y dimensiones
  • Ancho: 190 mm
  • Profundidad: 100 mm
  • Altura: 195 mm
  • Peso: 356 g

• Contenido del embalaje
  • Adaptadores de audio incluidos: 2 x 3.5 mm

El headset en sí mismo tiene una visual realmente brillante. Esta versión K lleva un estilo camuflado de diferentes tonos de grises, mucho más interesante que la versión tradicional en negro monótono, y su diseño en la linea de los Arctis de Steelseries o los HS de Corsair le da el toque de elegancia al que apunta la marca.

Pero además de su visual atractiva, este headset está compuesto por materiales de alta calidad, con pads de gran espesor de espuma viscoelástica (esa que mantiene la forma por un rato) recubierta en cuerina negra, y carcasas de plástico de buena resistencia en tonos mate, del mencionado estilo camuflado. La vincha es deslizable, con trabas de regulación a través del alma de acero elástico cepillado. En general, su peso está en la mitad del ranking de peso de headsets, alcanzando los 345 gramos, lo que lo ubica casi 100 gramos por debajo de los headsets con drivers más pesados, y 100 por arriba de los modelos más ligeros de alta gama.

Gracias al espesor de sus almohadillas, el sonido resultante de los tradicionales drivers de 50mm de neodimio es cálido, completo de graves y de buena calidad, con un poco de pérdida de agudos como suele suceder con la gran mayoría de los headsets que no apuntan al audiófilo high-end. Por debajo de la carcasa izquierda sale el cable mallado que en su extremo presenta el control de volumen y el switch para desactivar el micrófono, y sumado a la extensión que permite conectarlo a la PC, suma un total de 2 metros de longitud.

En la carcasa izquierda también se encuentra el brazo pivotante del micrófono, que se puede retraer en forma paralela a la vincha. Su diseño es bastante minimalista y no acompaña el estilo camuflado, sino que se acopla al negro mate de las almohadillas. Se trata de un receptor de un rango que va de los 10 a los 10,000Hz, lo cual permite una comunicación clara pero no apunta a los mejores estándares de calidad. Hace lo justo y necesario. Quizá el diseño de su carcasa es lo que más afecta a la visual general del equipo, ya que se ve sobredimensionada y de formas angulosas, lo cual contrasta un poco con lo que resulta de todas las demás formas.

La captura también se ve afectada por una ausencia de polaridad, ya que es un micrófono omnidireccional muy predispuesto a capturar ruidos de ambiente, y tampoco cuenta con un sistema de cancelación de ruido ni filtro “anti pop”, lo cual empeora un poco más la situación en favor de ahorrar costos para que este modelo sea realmente accesible. Y eso es justamente lo que consigue. Aún así, al utilizar la suite Nvidia Broadcast, más específicamente la tecnología RTX Voice, nos ayudará mucho a eliminar sonidos ambientales.

El balance general entre buena estética y durabilidad, muy buena calidad de sonido y la ausencia de características que podrían mejorar un poco más la experiencia hacen que por tan solo 7000 pesos (en Argentina) podamos tener algo similar a modelos de un poco más de calibre, lo que es ideal para tener un buen primer pantallazo de lo que es el mundo gamer de los periféricos. Esto coloca a Trust en un sector donde generalmente compiten marcas como Redragon, Sharkoon y en menor medida Noga o Genius, y dado el nivel de este producto, seguramente escale mucho más rápido en la elección de los consumidores.

Lejos de pretender deslumbrar con visuales de retroiluminación LED o algunas prestaciones extra que solo encarecerían el producto, Trust, con el GXT 433K Pylo Camo Black, ha logrado desarrollar una experiencia por demás aceptable para los recién iniciados, y tan solo por eso, es un periférico que se gana la recomendación.

Este review fue realizado con un sample proporcionado por Trust.