Teclado Corsair K100 – Review

Cada vez que nos topamos con una meseta de innovaciones en la industria de los teclados mecánicos, siempre creemos que hemos llegado a la cima, que no hay forma de avanzar más allá de lo ya propuesto por las marcas más importantes, pero por suerte, empresas vanguardistas como Corsair, logran encontrar un nuevo diferencial que parece inalcanzable, y ahí es donde yace lo más importante de la propuesta de este K100 que hoy nos toca revisar.

Como su nombre lo indica, este teclado premium RGB representa todo un hito para la marca, reemplazando nada menos que al espectacular K95 Platinum XT con nueva tecnología, excelente diseño e interesantes nuevas funcionalidades.

El K100 RGB viene contenido en uno de los excelentes nuevos packagings de la marca, con el frente completamente cubierto por la imagen del dispositivo, destacado en hot stamping, y los laterales de plenos amarillos, característicos de la marca. Se detallan el modelo del teclado, el idioma del layout al que corresponde, y el tipo de switches que incluye, ya que existen las variantes puramente mecánicas con los CherryMX Speed, y óptico-mecánicas con los switches Corsair OPX, que son los que incluye el que nos tocó probar.

Al salir de la caja nos encontramos con una presentación muy cerca de las líneas generales de los últimos teclados de la marca, como los Strafe y K70 Mk2, y el mencionado K95 Platinum XT. Al igual que su antecesor, este modelo presenta las teclas macro a la izquierda, en un tono más claro que a las del resto del teclado; teclas de control multimedia, y rueda de volumen metálica moleteada a la derecha, junto con el botón para silenciar el audio.

• Peso: 1.31kg
• Dimensión: 470 x 166 x 38mm
• Interruptores de teclas: CORSAIR OPX
• SKU: CH-912A01A-NA
• Retroiluminación del teclado: RGB
• Matriz: 110 teclas
• Teclas de macros: 6 teclas G dedicadas
• Índice de informes: Hasta 1 ms
• Matriz: 100% anti-ghosting con rollover de llave completa en USB
• Tamaño de teclado: Extendido
• Memoria interna: Sí (8 MBs – hasta 200 perfiles dependiendo de la complejidad)
• Teclas multimedia: Seis teclas multimedia dedicadas, incl. Rodillo ascendente / descendente de volumen.
• Reposamuñecas: De cuerpo entero, desmontable y magnético.
• Software: Corsair iCue, Elgato Stream Deck
• Tipo de cable: USB de fibra trenzada de 1.8m
• Tecla de Bloqueo: Sí
• Precio: u$s 230

Compatibilidad y requisitos del sistema:

• • PC con 2 puertos USB 2.0 
  • Windows 10, Windows 8, Windows 7 o Windows Vista 

Para comenzar por lo más marketineado por la marca, este teclado se presenta como un punto de quiebre generacional en cuanto a la tecnología de estos periféricos, ya que -a diferencia de todo el resto de los teclados alta gama- este cuenta con un polling rate de 4000Hz, lo que significa que, en vez de “sensar” mil veces por segundo cuándo se presiona una tecla, este lo sensa el cuádruple de veces, y para que esta funcionalidad se arrime siquiera a un mejor rendimiento práctico, no podría estar acompañada de otros switches que no sean los mencionados OPX, que presentan una fuerza de actuación de 45g, una distancia de activación de 1.0 mm y hasta 0.25 milisegundos de tiempo de respuesta gracias a la tecnología de procesamiento Corsair AXON, con el que podremos llegar a la mencionada tasa de sondeo.

El K100 cuenta con un procesador SoC que trabaja en forma de multithreading, lo que le permite repartir tareas paralelas al igual que hace un procesador central de una computadora, y así multiplicar su velocidad de análisis. Por su parte, los pulsadores ópticos – debido a su naturaleza sin fricción secundaria- responden tan rápido como su mecánica permite interrumpir la luz que los atraviesa, en un recorrido de tan solo 1mm como mencionamos previamente, multiplicando teóricamente el tiempo de reacción del teclado, siempre que nuestra velocidad de manos lo permitiera.

Estas características técnicas no van a lograr que los jugadores menos habilidosos de repente obtengan una ventaja por sobre el resto de los competidores, pero sí es un cambio fundamental para acompañar a un mundo competitivo en donde el tiempo de imagen en pantalla es mucho menor al que se alcanzaba con los monitores de 60Hz hace algunos años. Es un teclado que presenta tecnología que será relevante en el futuro, que por más que no lleguemos a tener la pericia física para responder a la velocidad que propone, sí estará a ritmo con lo que pasará en las partidas más vertiginosas de los juegos más populares del segmento.

Por fuera, la dirección estética también apunta a un futuro de nuevos modelos con algunos cambios sutiles -para no perder identidad- pero muy interesantes, que adoptan la idea del RGB llamativo, de tintes “cyberpunk” si se quiere, acompañado por brillantes líneas de estilo que refuerzan el buen gusto de la marca. Los perfiles ahora son mucho más dramáticos, filosos, pero sin exageraciones de los dispositivos que veíamos a principios de milenio.

Dado que el K100 no cuenta con los típicos LEDS de los previos teclados de la marca (u otras marcas), en el medio se encuentra un panel que nos indica a la izquierda del logo las funciones de bloqueo de la tecla de Windows (que ahora es dedicada y se encuentra a la derecha de la rueda iCUE), Macros (al activar para grabar uno) y Silencio, mientras que a la derecha se ubican los LEDs de bloqueo de mayúsculas (Caps Lock), numérico (Num Lock) y desplazamiento (Scroll Lock)

El marco que contiene a todo el layout es de metal cepillado, pintado en negro, como se viene implementando hace varias generaciones, pero además cuenta con algunos detalles muy sutiles como la impresión del modelo en el costado izquierdo, en una tipografía pequeña y casi imperceptible. La tipografía de las teclas ha recibido otra revisión, para una mayor claridad, y definitivamente se ha solucionado el problema de los “shifts” invertidos que vimos en los modelos K70 Mk2 y Strafe Mk2.

En este modelo, la marca ha incorporado la tecla de “Función” en lugar de la tecla de Windows del lado derecho, que es la que permite alternar entre diferentes presets de animación y velocidades ya incluidos en el software interno del dispositivo, y en esta misma revisión, ajustó las medidas del grupo de teclas inferiores, lo que resulta en una barra espaciadora de un menor tamaño, algo que no es ideal para algunos jugadores que suelen trabajar en sus extremos.

A partir de acá, el K100 comienza a enumerar sus características más premium, las más palpables, que hacen que la experiencia se note mucho más en el uso cotidiano y no haya que indagar tanto para reconocerlas. En primer lugar, hay que considerar que el apartado RGB ha llegado a límites insospechados, ya que no solo permite ajustar la iluminación de cada tecla individualmente (como se suele proponer en todos los modelos de media y alta gama de la marca), sino que en este caso se ofrecen un total de 44 zonas laterales LightEdge (24 en la fila superior, 10 en cada extremo) que se pueden ajustar independientemente para iluminar el contexto del teclado y expandir el efecto al resto del escritorio.

Como no podía ser de otra manera, la retroiluminación de estos teclados es de alta calidad, con un relleno completo de las zonas donde se presenta, sin zonas negras, lo que permite que los efectos se trasladen entre ellas con transiciones suaves, sin sobre saltos, acompañando a todo el ecosistema iCue sin ningún inconveniente.

En segunda instancia, la almohadilla de descanso para las muñecas propone un salto de escalón con respecto a la del K95 Platinum XT, ya que en este caso se extiende un poco más en tamaño, ofrece acabado esponjoso en cuerina, con un lindo detalle gráfico de la marca en el centro, y de aplicación magnética: en vez de anclarse con trabas plásticas, de las que siempre nos dejan con miedo a que se rompan cuando ponemos o sacamos el descanso, este teclado ofrece un simple sistema de metales e imanes para que la almohadilla se pueda extraer sin problemas, cuantas veces se quiera.

Pero la gran estrella de esta fiesta es la incorporación de la nueva rueda iCUE al sistema de este teclado. Si bien para muchos puede parecer algo disruptiva en la estética del teclado, sin dudas cumple con la búsqueda estética que proponen los otros lineamientos estéticos de este modelo. La rueda iCUE es un nuevo acceso directo del teclado, que mediante el software homónimo que se encarga de la administración de todos los dispositivos de la marca, se le pueden asignar variadas funciones de control, detalladas más abajo en la sección del software iCUE.

Dichas funciones se van alternando al hacer click sobre la rueda, y al girarla podemos controlar el brillo del teclado, hacer scroll sobre una pista de Spotify o iTunes, cambiar de canciones, alternar entre aplicaciones, hacer scroll vertical en páginas web, hacer scroll horizontal, zoom, o ejecutar diferentes macros programables, entre otras cosas. A cada funcionalidad se le puede asignar un color diferente, para un rápido reconocimiento, y gracias a la capacidad de almacenamiento interno del teclado, todo esto también se puede guardar para mantenerlo aún cuando no contamos con la herramienta instalada en el sistema.

Quizás no haga falta aclararlo, pero con iCUE podemos configurar el color de cada tecla en forma individual, como también elegir varios patrones de efectos de iluminación, junto con su velocidad y nivel de iluminación. Gracias a su compatibilidad con periféricos, sistemas de refrigeración, ventiladores y otros productos de la marca (como las barras LED RGB iCUE LS100 y las torres de iluminación RGB iCUE LT100), podremos sincronizar la iluminación de toda nuestra PC y sus periféricos.

Por supuesto, con iCUE también podemos configurar las teclas macro (con una práctica herramienta que detalla los milisegundos entre cada acción) y otros ajustes varios al activar la tecla de bloqueo de Windows (tales como deshabilitar Alt+Tab o Alt+F4). Todas las configuraciones pueden quedar almacenados por hardware en la memoria de 8 MBs del teclado, que permite ahora hasta 200 perfiles dependiendo de la complejidad de cada perfil.

La tasa de sondeo la tendremos que configurar desde el menú de configuración de iCUE, no desde el dispositivo mismo. Esta es una de las razones por la cual el software iCUE necesita una renovación, ya que algunos menues y opciones podrían ser un poco más intuitivas dependiendo del dispositivo y sus prestaciones.

Mediante el software Stream Deck se les puede dar a las teclas Macro una funcionalidad similar a la del accesorio Elgato Stream Deck, para las que se pueden asignar macros o actividades especiales como la de abrir una aplicación específica o ejecutar una acción en el software de transmisión de turno, como X-Split u OBS, y para todo el resto – como el control de la retroiluminación LED RGB, los macros tradicionales y el guardado de las configuraciones en la memoria interna del periférico – hay que recurrir al software iCUE de la marca.

La única contra de esto, es que estaremos obligados a instalar un segundo software sólo para este propósito. Quizás Corsair pueda integrarlo en iCUE en algún futuro, pero por el momento tendremos que tener ambos instalados en caso de querer disfrutar de este práctico beneficio.

Definitivamente, este es un teclado completamente pensado para ofrecer la mayor experiencia técnica que existe actualmente en el mercado. Si bien su estética sigue estando muy arrimada al resto de las propuestas de Corsair, los nuevos ajustes de diseño se presentan como el inicio de una nueva generación de dispositivos que intentan renovar el paradigma estético y técnico de este tipo de periféricos, augurando un mundo de mayor velocidad y propuestas de personalización mucho más profundas.

Como no podía ser de otra manera, todo este conglomerado de avances técnicos de carácter premium también implica un plus premium en su precio, sobrepasando por 30 dólares a su antecesor K95 Platinum XT, pero considerando que este es el primer teclado que llega a un polling rate de 4000Hz, la nueva ruedita iCUE y LEDs RGB en los costados, la diferencia se puede llegar a relativizar. Sin lugar a dudas, es un modelo único, solo para los más exigentes.

Este review fue realizado con un sample proporcionado por Corsair Latinoamérica.