Poco más de medio año después del lanzamiento oficial del esperado Age of Wonders III, la gente de Triumph Studios nos trae la primera expansión para su aclamado juego de estrategia 4X: Golden Realms. Particularmente, Age of Wonders III me pareció el mejor dentro del montón de los distintos juegos 4X ambientados en un mundo fantástico que salieron últimamente, como pueden ser Warlock: Master of the Arcane o Elemental. War of Magic. La oferta de Triumph logró destacarse a base de tener un excelente componente táctico sumado a su faceta estratégica. A simple vista mucha gente denomina a estos juegos como “clones de Civilization V con magia”, pero la verdad es que en este caso estamos bastante alejados de eso. Mientras que el juego de Firaxis enfatiza el gameplay a escala estratégica, Age of Wonders III se enfoca de forma triunfal en la faceta táctica, dejando el contenido disponible a la hora de formar y desarrollar nuestro imperio en un segundo plano. Las mayores influencias de Age of Wonders III deben buscarse entonces en sus anteriores entregas por un lado, y en la saga Heroes of Might and Magic por otro.

No vamos a ahondar en esta reseña en las bondades y debilidades del juego en su estado “vanilla”, bastará decir aquí que Triumph ha cumplido de forma excelsa con el soporte post-launch y Age of Wonders III recibió hasta la fecha varios parches y rebalanceos. El trabajo de Triumph en este aspecto ha sido envidiable, y se han asegurado de pulir su producto lo más posible. La nueva expansión, que es el foco de nuestra reseña, agrega nuevas sorpresas a una ya éxitosa fórmula. Quedará analizar si los nuevos componentes se complementan correctamente con un producto tan bien aceitado.

In a hole in the earth….

El principal agregado de Golden Realms al titulo original es una nueva raza y una nueva campaña. En este caso se trata de los Halflings, o medianos, pero también conocidos por todos como Hobbits. ¿Alguien vio esas películas de El Señor de los Anillos allá por comienzos del milenio? Bueno, esos mismos. Esta nueva raza se agrega a las seis anteriores a la hora de jugar escenarios o mapas aleatorios, pero además son los protagonistas de una nueva campaña que se suma a las anteriores enfocadas en la corte elfica y el commonwealth humano. Lamentablemente esta campaña sufre las mismas debilidades y falencias que las campañas originales de Age of Wonders III: Es corta, el lore es mayormente genérico y algunos de los objetivos a cumplir son bastante frustrantes. El punto fuerte del juego definitivamente no esta en sus campañas.

En los escenarios o los mapas aleatorios, los elementos que traen los halflings al tablero se disfrutan bastante más. Se trata de una raza de personitas bastante debiluchas, por lo que sus unidades tienen una penalización importante a la vitalidad. Pero a la vez son capaces de mantenerse al frente en la lucha cuando la situación lo amerita, con unidades de ataque a distancia capaces de causar una buena cantidad de daño incluso en los primeros turnos de la partida. Además de la capacidad de poner equipamiento (y animales!) de granja a buen uso militar, o llamar a las águilas para que los auxilien, ya saben, cosas de hobbits. Además cuentan con la poderosa habilidad de raza llamada “Luck!” que les permite en forma aleatoria esquivar la totalidad de un ataque. Esto resulta ser un arma de doble filo, ya que agrega un grado alto de incertidumbre a los combates. Pero con una buena dosis de suerte los medianos pueden triunfar donde otras razas seguramente fallarían.

Los halflings son además buenos escaramuzadores e infiltradores, pudiendo pasar desaparecibidos donde otras razas resaltan. Esta característica sinergiza perfectamente con la especialización de partisano, una de las dos nuevas especializaciones que trae el juego para nuestros héroes (la otra es la especialización de magia salvaje). La especialización de partisano va a permitir que nuestros personajes preparen emboscadas y ataquen al enemigo cuando menos se lo espera, mientras que la magia salvaje nos da acceso a toda una nueva escuela de hechicería especializada en cambiar el flujo del campo de batalla con resultados impredecibles. En este aspecto es una pena que las habilidades de partisano no puedan aplicarse a ejércitos enteros sino solo a unidades individuales, preparar una buena emboscada requiere una incomoda cantidad de micromanagement.

Age of improvements

Hay otra serie de modificaciones y agregados interesantes a nivel de gameplay estratégico. En primer lugar contamos con una nueva guarida de criaturas que podemos someter y poner a nuestras ordenes: las nagas, poderosos hombres y mujeres serpiente dispuestos a alimentarse de la carne de nuestros enemigos. En segundo lugar el mapa de campaña cuenta con un nuevo sitio de interés: la ciudad perdida, que otorgará importantes bonús al imperio de los exploradores más valerosos. Explorar el mapa de Age of Wonders III siempre fue una de las prioridades del jugador de cara a la victoria, estos agregados no hacen más que enfatizar esa faceta del juego. Finalmente, a nivel estratégico, tenemos una nueva serie de edificaciones para nuestras ciudades, por un lado nuevas edificaciones defensivas que varían en utilidad de acuerdo a la raza que utilicemos, y por otro lado una nueva especialización para nuestras ciudades derivada de la exploración y la explotación de tesoros arcanos

Con respecto a las otras razas, se hecha de menos en esta expansión algún agregado más a sus unidades y características, jugar con los humanos, enanos, elfos, orcos, draconianos o goblins es casi lo mismo que jugar en el juego original. También se extraña el agregado de alguna clase más, si bien las que están disponibles ya son bastante variadas e interesantes. Al parecer agregados a este tipo de aspectos Triumph se los esta guardando para futuras expansiones (de hecho, la segunda expansión ya esta anunciada, y se centrará en la raza de los Undead), una práctica de comercialización que lamentablemente se hace cada vez más común, si bien tiene como punto positivo que ayuda a prolongar la vida útil de este y otros juegos.

En la escala táctica los agregados y modificaciones son menos notables pero igualmente bienvenidos, contamos con una nueva serie de habilidades (en especial las relacionadas con la magia salvaje y la habilidad de partisano) y con más de 50 nuevos ítems para equipar en nuestros héroes. Además de una nueva serie de unidades que encontraremos en el mapa de campaña para enfrentar o añadir a nuestro imperio, principalmente las nagas.

Imperial Growth

Finalmente hay que hablar del multijugador. Age of Wonders III es un excelente juego para encarar con amigos, especialmente debido a su excelente combate táctico y su sistema de turnos simultáneos que permite mantener la acción fluida sin molestas esperas (siempre hay uno que se toma demasiado tiempo con su turno). Para fomentar el gameplay competitivo Triumph ha incluido un nuevo sistema llamado “Empire Quests”, el cual básicamente funciona como una forma de competencia pasiva entre distintos imperios, que no depende del combate sino del grado de crecimiento, exploración y desarrollo de las ciudades, héroes y unidades de cada jugador (o de la IA). Por ejemplo, si somos el primer imperio en desarrollar una unidad de fin de juego, esta unidad recibirá bonificaciones únicas. Otras tareas son de mayor alcance, como convertirse en el jugador más maligno de la partida o explorar primero ciertas regiones. Es un cambio que sin duda agrega una muy necesaria dinámica a la parte estratégica, bastante flojita con el juego vainilla.

Con respecto a lo técnico, hay muy poco para agregar ya que no hay cambios importantes con respecto a la versión original del juego. Age of Wonders III no es el juego más bonito, pero para un juego 4X es más que cumplidor y el rendimiento de las partidas es óptimo. La banda sonora también esta a la altura, si bien por momentos es poco inspirada al igual que el trabajo de voces.

En conclusión, Golden Realms es un paquete de expansión bienvenido para cualquier fanático de este juego de estrategia. No podemos dejar de señalar que algunos de los problemas más importantes con Age of Wonders III no fueron corregidos con esta expansión, aun se siente que el aspecto estratégico del juego cae en un lejano segundo plano con respecto a las batallas tácticas. Y el agregado de nuevas características a las razas ya existentes es un elemento que destaca por su ausencia. Pero a pesar de estos problemas, la expansión cumple en darle una nueva capa de pintura al producto de Triumph, y por el precio que piden (U$S 11.99) no podemos quejarnos. Golden Realms es una muy buena expansión y, para bien o para mal, la primera de varias por venir.